31 enero 2006
Firma bloguera
Siempre me ha hecho gracia ver los nombres que utilizamos muchos para navegar e ir dejando nuestra huella por la blogosfera; una careta que te permite opinar sin dar la cara realmente ..... un paño de privacidad que vela por tu intimidad, que te permite decir lo que quieres sin que nadie pueda ponerte cara e historia salvo que tu te desveles.
Los nombres de la blogosfera son de lo más variopinto .... casi como el santoral católico que tanto ofrece en esa materia y que tan poco juego da a tenor de la moda imperante de insistir en ponerles a los niños Alejandro y a las niñas Lucía (7.381 y 10.370 nominaciones entre los nacidos en 2004; los de los niños debe ser para potenciar su afán de grandeza y lo de las niñas para que el nombre les cuide la vista y no se vayan con el primer merluzo que las pretenda timar).
¿A qué obedecen sus nombres blogueros? ¿Se los buscaron Vds.? ¿Es un mote que ya tenían? ¿Lo primero que se les ocurrió? ¿Un acrónimo? ¿Un guiño a sus filias y fobias?. Las razones pueden ser mil ..... el mío fue un pronto en el que relacioné la pasión por decir lo que quiero respecto de los asuntos que me molestan (los barros del mundo) y así, en un pis-pas, me encontré con una nueva identidad bloguera -Salvatierra de Barros ...... que se ha adosado a mi vida y me depara muchos momentos de diversión, entretenimiento y curiosidad.
No se pierdan, por cierto, un comentario de Tyler Cowen en el que se pregunta por qué la gente escribe bitácoras secretas - es otro fenómeno divertido.
Los nombres de la blogosfera son de lo más variopinto .... casi como el santoral católico que tanto ofrece en esa materia y que tan poco juego da a tenor de la moda imperante de insistir en ponerles a los niños Alejandro y a las niñas Lucía (7.381 y 10.370 nominaciones entre los nacidos en 2004; los de los niños debe ser para potenciar su afán de grandeza y lo de las niñas para que el nombre les cuide la vista y no se vayan con el primer merluzo que las pretenda timar).
¿A qué obedecen sus nombres blogueros? ¿Se los buscaron Vds.? ¿Es un mote que ya tenían? ¿Lo primero que se les ocurrió? ¿Un acrónimo? ¿Un guiño a sus filias y fobias?. Las razones pueden ser mil ..... el mío fue un pronto en el que relacioné la pasión por decir lo que quiero respecto de los asuntos que me molestan (los barros del mundo) y así, en un pis-pas, me encontré con una nueva identidad bloguera -Salvatierra de Barros ...... que se ha adosado a mi vida y me depara muchos momentos de diversión, entretenimiento y curiosidad.
No se pierdan, por cierto, un comentario de Tyler Cowen en el que se pregunta por qué la gente escribe bitácoras secretas - es otro fenómeno divertido.
27 enero 2006
Una más sobre hipotecas
Hipotecas por arriba, hipotecas por abajo, el país se va al garete porque está muy hipotecado, el Banco de España está preocupadísimo, nos dan todo el rato datos alarmantes ..... pero ¿podrían darnos los datos mejor contados y con alguna reflexión añadida?. Apunto un asunto que nunca tocan cuando nos dan los datos sobre hipotecas: La unificación de deudas.
Habrán visto mil anuncios de entidades bancarias, sus amigos les habrán contado que lo hacen, pero esa información no aparece en los medios. Los usuarios unifican sus deudas bajo una nueva hipoteca constituida sobre el creciente valor de sus viviendas para seguir consumiendo y poder así comprarse un coche, amueblar la casa, irse de vacaciones, etc. con préstamos hipotecarios y no préstamos al consumo (muchísimo más caros). Las autoridades pueden bramar por el incremento del endeudamiento familiar pero es que sobre él se basa, en gran medida, el mantenimiento del consumo. Frena ese endeudamiento y se frenará el consumo -de coches, de viajes, de muebles, etc.. Así que cuando hablan del creciente endeudamiento familiar para comprar ladrillos no sabemos qué parte es endeudamiento familiar para otros fines.
Y lo que es más grave. No hay datos cuantitativos al respecto.
Habrán visto mil anuncios de entidades bancarias, sus amigos les habrán contado que lo hacen, pero esa información no aparece en los medios. Los usuarios unifican sus deudas bajo una nueva hipoteca constituida sobre el creciente valor de sus viviendas para seguir consumiendo y poder así comprarse un coche, amueblar la casa, irse de vacaciones, etc. con préstamos hipotecarios y no préstamos al consumo (muchísimo más caros). Las autoridades pueden bramar por el incremento del endeudamiento familiar pero es que sobre él se basa, en gran medida, el mantenimiento del consumo. Frena ese endeudamiento y se frenará el consumo -de coches, de viajes, de muebles, etc.. Así que cuando hablan del creciente endeudamiento familiar para comprar ladrillos no sabemos qué parte es endeudamiento familiar para otros fines.
Y lo que es más grave. No hay datos cuantitativos al respecto.
04 enero 2006
Lecturas sugeridas (I)
Llega a mi ordenador, vía Escepticemia (un boletín de noticias médicas de Editorial Doyma), el nombre de Petr Skrabanek y con ello una ventana al mundo de la crítica a los sistemas al uso de establecer dogmas en materia de salud y prevención sobre la base de investigaciones no concluyentes y consensos establecidos forzadamente.
Este médico, checo de nacimiento, y de errante vida universitaria y profesional que le llevó de la Europa Comunista a Irlanda cuestiona en sus obras las locuras y falacias de la ciencia y, especialmente, de la medicina. Sirvan a modo de ejemplo los títulos de dos de sus obras: Follies and Fallacies in Medicine (escrito con James McCormick) y False Premises, False Promises, títulos sugerentes e ilustrativos de su contenido. Son obras accesibles y comprensibles y no están orientadas necesariamente a médicos y profesionales de la salud. En este último libro el capítulo 9 Nonsensus consensus es una joya de cuatro páginas por la simplicidad para desmoronar la bondad (e inconsistencia) del consenso como norma en la ciencia.
Skrabanek fue un crítico de la defensa numantina que tantos hacen de un único estilo de vida como saludable, así como de aceptar sin cuestionarse las supuestas soluciones que los investigadores dan a los problemas que enfrentan en temas de salud y que consiguen imponer a través de consensos que son aceptados por los políticos y los burócratas porque fueron directrices emanadas de una reunión de 'expertos'.
En estos tiempos que nos toca vivir (con la ley antitabaco) y la nueva ola de terror que se avecina con la ley antialcohol (parece que, por ahora, nos dejan en paz con el café, el thé y el poleo-menta) que ya nos empiezan a anunciar es muy saludable volver sobre este autor. Lástima que ya no siga entre nosotros para se
Este médico, checo de nacimiento, y de errante vida universitaria y profesional que le llevó de la Europa Comunista a Irlanda cuestiona en sus obras las locuras y falacias de la ciencia y, especialmente, de la medicina. Sirvan a modo de ejemplo los títulos de dos de sus obras: Follies and Fallacies in Medicine (escrito con James McCormick) y False Premises, False Promises, títulos sugerentes e ilustrativos de su contenido. Son obras accesibles y comprensibles y no están orientadas necesariamente a médicos y profesionales de la salud. En este último libro el capítulo 9 Nonsensus consensus es una joya de cuatro páginas por la simplicidad para desmoronar la bondad (e inconsistencia) del consenso como norma en la ciencia.
Skrabanek fue un crítico de la defensa numantina que tantos hacen de un único estilo de vida como saludable, así como de aceptar sin cuestionarse las supuestas soluciones que los investigadores dan a los problemas que enfrentan en temas de salud y que consiguen imponer a través de consensos que son aceptados por los políticos y los burócratas porque fueron directrices emanadas de una reunión de 'expertos'.
En estos tiempos que nos toca vivir (con la ley antitabaco) y la nueva ola de terror que se avecina con la ley antialcohol (parece que, por ahora, nos dejan en paz con el café, el thé y el poleo-menta) que ya nos empiezan a anunciar es muy saludable volver sobre este autor. Lástima que ya no siga entre nosotros para se